Los subsidios para Colombia sin Hambre y Renta Joven, que también se había conocido antes como Jóvenes en Acción, se acaban el próximo año. Estos programas que ayudaban a familias en la pobreza cambiaron de reglas; la razón: recorte presupuestal y falta de recursos.
El director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, explicó qué va a pasar con los cerca de tres millones de beneficiarios de estos subsidios.
“La gente tiene que entender es que esto no es que uno quiera hacerlo. Simplemente yo tenía 10.7 billones de pesos este año, esta vigencia de 2024, y para el año entrante me fueron asignados 5.3 billones de pesos, entonces obviamente tengo que hacer malabares”, aseguró Bolívar.
Colombia sin Hambre hasta este año fue un programa que ayudaba a cerca de tres millones de hogares en pobreza extrema y hogares indígenas con Máximo de $500.000 de subsidio.
Por su parte, Renta Joven era la vinculación de jóvenes en estado de vulnerabilidad a la educación superior. Un poco más de 400.000 jóvenes estaban beneficiados con transferencias no superiores a $400.000 pesos. Ahora hay nuevas reglas para incentivar el trabajo de estas poblaciones.
“Hay que empezar a desmontar estos subsidios, porque lo que estamos es generando una pobreza perpetuando la pobreza. Hay gente que ni le pone piso a la casa por temor a salir del Sisbén A. Empecemos un trabajo para lograr que ellos se asocien en cooperativas y nosotros desde Prosperidad Social les vamos a financiar el interés de ese préstamo para que las personas empiecen a emprender y a generar su propio ingreso, su propio trabajo”, complementó Bolívar.
¿Para el 2025 qué líneas de subsidios quedaron en el DPS?
- Colombia Mayor: una transferencia que pasará de $80.000 pesos a $230.000 para 2.8 millones de adultos mayores, que superen los 60 años y no tengan pensión o vivan en pobreza extrema.
- Renta Ciudadana: destinada a madres cabezas de hogar con hijos menores de 6 años. Ellas recibirán un subsidio no superior a $500.000.
- Devolución del IVA: programa de transferencias que busca reducir el impacto del cobro del impuesto sobre las ventas en los hogares más pobres del país.