En la vereda Puente Canoa, jurisdicción del municipio de El Paso, la comunidad se encuentra preocupada por las condiciones en que se encuentra el río Cesar, generándose una masiva mortandad de peces por causas que esperan sean investigadas por las autoridades ambientales, ya que las aguas del afluente tienen un color rojo y con bastante viscosidad.
La alerta fue emitida por la líder comunitaria, Luz Marina Franco, quien aseguró que inicialmente la comunidad y los pescadores pensaron que se trataba de un envenenamiento, pero luego se percatan de la grasa que hay en las orillas del río, el olor y la textura del líquido sin que hasta ahora se sepa su procedencia.
“Seguimos en incertidumbre, sobre las posibles causas de esta emergencia ambiental, que afecta la actividad económica en la zona, ya que la pesca representa la principal fuente de ingreso de los habitantes”.
Explicó que se han perdido gran cantidad de especies como la raya, mayupa, barbudo, comelón, bocachico, entre otras. Esta crítica situación tampoco permite a la población agarrar el agua del afluente para hervir y tomarla.
La situación fue expuesta a la Corporación Autónoma Regional del Cesar (Corpocesar), para que tome acciones inmediatas. “Esperamos que nos den respuesta lo antes posible, ya que en otras oportunidades la inspección en la zona la hacen después de un mes. Queremos saber si se trata de un fenómeno natural o una mala acción del hombre, ya que algunos campesinos aseguran que empresas estarían haciendo trabajos afectando el ecosistema”, dijo la denunciante.
En respuesta a esta solicitud, Jorge Luis Fernández, director de Corpocesar, dijo que un equipo especializado evaluará las aguas del río, para asumir medidas en caso de detectar algún daño provocado.
Sin embargo, ofreció un parte de tranquilidad a los moradores de la zona, asegurando que pueden seguir extrayendo la arena y los productos básicos para subsistir, principalmente por parte de los pecadores y campesinos.