La Corte Constitucional continuará este jueves la discusión sobre si flexibiliza o no las condiciones que permitirían el uso del glifosato y se espera llegar a un consenso.
Al parecer podría ir tomando fuerza una tendencia hacia la posibilidad de permitir el uso de la aspersión siempre que se cumpla con lo pactado en el punto 4 del acuerdo de paz frente a la estrategia integral para la erradicación de los cultivos ilícitos. Pero, no del todo, pues seguiría latente la división de cuatro magistrados contra cuatro.
Lo que está haciendo la Corte es revisar si el Gobierno cumplió con las seis condiciones para determinar que se puede reanudar la aspersión con glifosato: regulación de un órgano independiente que garantice la evaluación de los riesgos sobre la salud de los ciudadanos; evaluación a los riesgos en el medio ambiente; un mecanismo de revisión automática cuando se alerte sobre nuevos riesgos; incorporar investigaciones científicas con estándares de rigor, calidad e imparcialidad; establecer procedimientos de queja, vinculados con la evaluación de riesgo, y utilizar evidencia objetiva y concluyente sobre la ausencia de daño a la salud y el ambiente.
La discusión más álgida se da por ese último punto pues algunos plantean que sería incumplible, y otros que debe primar el principio de precaución.