Luego de varias semanas de crisis política y discusiones entre congresistas, Israel disolvió su parlamento. La decisión ocurrió porque la coalición gubernamental no cumplió con los plazos para aprobar los presupuestos del estado.
Varios congresistas han estimado que el partido de gobierno no intentó cumplir la fecha limite por orden del primer ministro, Benjamin Netanyahu, logrando que el cronograma se mueva y no deba entregar el poder en noviembre del 2021.
Aun así, la cuarta jornada electoral será en marzo y ocurre justo cuando Netanyahu es ampliamente criticado por la ciudadanía por su manejo de la pandemia al igual que su cercanía a casos de corrupción.