Un hombre que había generado indignación en redes recibió la máxima sentencia por la crueldad con la que asesinó a su exesposa. Lo que había desatado todo tipo de comentarios de rechazo fue que transmitió la escena en vivo.
El caso se conoció en septiembre de 2020 en China cuando una influencer de 30 años, conocida como Amuchu, falleció a manos de su expareja. El agresor, Tang Lu, compartió en una transmisión cómo le roció gasolina sobre su cuerpo y luego le prendió fuego.
La mujer fue llevada a un hospital pero semanas después falleció por la gravedad de sus heridas. En ese entonces se supo que la bloguera se había separado del sujeto por los actos de violencia y su reprochable historial.
Ahora se conoció que un tribunal en la prefectura de Aba lo condenó a muerte por homicidio. “Su crimen fue extremadamente cruel y el impacto social fue malo”, dice una sentencia en la que piden un castigo severo de acuerdo a la ley, según informó AFP.
Sobre la influencer, se sabe que tenía una constante actividad en Douyin, una red social China que se compara con TikTok. Allí mostraba su cotidianidad, divertidos bailes y otros retos.
También se informó que a través de esa plataforma se realizó la polémica transmisión que acabó con su vida tras las quemaduras con gasolina.